16.4.09

Análisis personal. Francisco López Sánchez

Tras haber leído los comentarios y propuestas, para mi, radical no significa algo fuera de lo común, ese “común” tendrá que permanecer, pero en otro estado o nivel. Dicho nivel tiene que llegar a ser extremo, un estado que sea la máxima potencia de aquello en lo que estudiemos, que en nuestro caso es la ciudad de Madrid. Si no fuese común, es decir, algo inherente a nuestra ciudad, algo de la que forma parte, sería como si hiciésemos desaparecer Madrid y en su lugar, implantásemos algo que está fuera de contexto.
Por otro lado, pienso que este extremo puede ser negativo o positivo, como la temeridad y la cobardía..dos extremos en los cuales uno se caracteriza por exceso y otro por defecto.


En nuestro caso debemos buscar un extremo lo más favorable posible ya que nuestro estudio se debe de interesar por obtener una ciudad transformada y agrupar un gran número de eventos tanto de carácter social, cultural, deportivo…de gran interés. Entre otros factores a tener en cuenta está el crecimiento de la ciudad, un tema muy importante y que provoca muy diversas soluciones.


Mi propuesta está enlazada a la idea que expusimos sobre un árbol.




En esta imagen podemos observar una idea difusa, algo que nace, algo que mantiene unos recorridos y que dan una sensación de movimiento insinuando una ampliación o evolución. Estos caminos irregulares serían las raíces de un árbol que nacen a partir de un núcleo…el primer elemento que formará nuestra ciudad.





Comparando estas raíces con la ciudad, observamos tal semejanza de crecimiento. Por lo tanto mi idea es comparar el crecimiento de la ciudad con la de un árbol, pudiendo el resultado formar parte y pertenecer a la ciudad misma.





El crecimiento del árbol se produce por medio de sus raíces, pudiéndolo asociar a un crecimiento horizontal y que se extiende. Como antítesis, imaginemos que éstas raíces no siguen el orden lógico y que se alteran, intentan llegar a un extremo..a una situación radical. Este crecimiento será vertical y estas raíces nacerán de manera exacerbada, como podemos observar en el dibujo. De la misma manera nuestra ciudad sufrirá esta alteración.






La ciudad crecerá de forma vertical, uniendo estos eslementos a través de recorridos que podrían ser el reflejo de esas raíces del árbol. En esta propuesta puede ser introducida la adición de capas a distintos niveles según su funcionalidad o conveniencia.

Por último el suelo no sería habitable, sino que estaría cubierto de agua, elemento fundamental para alimentar a nuestra ciudad o árbol. El agua no ha sido todavía usado en ninguna propuesta, y me parece de gran interés jugar con esta opción; como por ejemplo levantar el retiro y en su lugar..cubrirlo de arena..creando asi un lugar que se pudiese asemejar a la playa. También me gustaría potenciar el uso del cristal para darle mayor luz y transparencia a una ciudad que a veces nos parece un poco agobiante.


2 comentarios:

  1. Me parece que paco ha entendido mal el "fuea de lo comun de Adrian, que creo que se referia a algo extrambotico, impactante...
    Por otra parte estoy de acuerdo con Paco en que tenemos que radicalizar lo comun de cada zona, incorporando en nuestra propuestas nuevas caracteristicas que hagan que unas zonas se fundan con otras creando asi una nueva ciudad sin que se pierda la anterior.
    Lo ultimo del agua, no lo comparto del todo. ¿se supone que madrid queda hundido?, ¿y la esencia de Madrid?¿y sus calles emblematicas, su historia, donde queda eso?¿ y el retiro una playa? , no me lo imagino.

    Adela!

    ResponderEliminar
  2. VAYA VAYA!! ...ya no se pede decir que no hay playa...

    Luis Gonzalez Arias

    ResponderEliminar